Guía de métodos anticonceptivos

 
UNICEF
Caja Costarricense de Seguro Social.
Sección Salud de la Mujer
San José,Costa Rica
Febrero 2001
Presentación

El tema de la sexualidad es difícil de tratar, considerando que hablamos del ser humano tanto individual como social. Se parte del hecho que todos nacemos siendo seres sexuados, es decir, se nace siendo hombre o mujer, con todas las características biológicas que esto encierra y que están determinadas desde nuestro nacimiento.

La sexualidad es todo un proceso que se construye desde niños, basado en el conocimiento, los valores, las creencias y las costumbres de las personas que nos rodean y que determinan nuestra formación como individuos.

El significado social de ser hombre o mujer transciende los aspectos biológicos y abarca la definición de roles, hábitos, costumbres y conductas esperadas, con lo que se define a la vez las valoraciones y juicios sobre lo correcto e incorrecto, lo permitido o no permitido para el hombre y la mujer dentro de la sociedad.

En estas circunstancias se deja muy poco espacio para reflexión individual sobre lo que significa ser hombre o mujer y si esa definición coincide con lo que nosotros sentimos o pensamos al respecto.

La sexualidad es una realidad cotidiana para cada uno de nosotros. El significado que tradicionalmente se le ha dado a "la sexualidad", es el de relaciones sexuales físicas, son considerar que ésta transciende lo físico y abarca nuestras emociones, sensaciones, formas de relacionarnos y expresar afecto.

Sin embargo socialmente la hemos rodeado de muchos tabúes, prohibiciones e inhibiciones que han limitado una auténtica expresión de nuestra sexualidad en lo individual y lo social.

Este documento pretende darnos la oportunidad de tener un acercamiento con nosotros mismos; intenta conducirnos a la reflexión sobre todo lo que somos y sentimos, partiendo del conocimiento de nuestros cuerpos.

Las características de cada ser humano definen el proceso de crecimiento y desarrollo del individuo, de su anatomía y funciones y con ello la aparición de sensaciones y deseos sexuales propios y absolutamente normales.

Es importante partir de un principio básico: "Reconocer que tenemos todo el derecho y el deber de tener una sexualidad plena y satisfactoria".

Si el ejercicio pleno de nuestra sexualidad se basa en este conocimiento y en la apropiación de nuestros cuerpos, nuestra conducta sexual podrá entonces ser más consciente, más clara y más definida y por ende más satisfactoria para nosotros mismos y para la sociedad.

Para poder sentirnos dueños y dueños de nuestros cuerpos, nuestra salud y nuestras vidas, debemos reconocer que es necesario informarnos sobre aspectos tan importantes como son la sexualidad y los métodos anticonceptivos.

Este folleto servirá de guía para responder a aquellas preguntas que tanto nos inquietan y recibir la información necesaria para tomar decisiones responsables y favorables a nuestro desarrollo pleno.

Sexualidad y  Reproducción

La sexualidad y la reproducción son dos cosas distintas. La sexualidad nos acompaña durante toda nuestra vida, abarca nuestros sentidos y puede manifestarse de diferentes maneras, siendo una de las más importantes fuentes de placer y bienestar corporal y mental.

La reproducción, por otra parte, es limitada en el tiempo, depende de la edad de las personas y los días fértiles del ciclo menstrual. En otras palabras, el poder engendrar hijos solo puede ocurrir en el período de tiempo que va desde días antes de las primera regla o menstruación, hasta la última vez que se presenta. Esto puede comprender desde los 9 a 12 años, hasta los 45 a 50 años en la mujer.

Podemos disfrutar de nuestros cuerpos y experimentar la plenitud de la sexualidad con nuestra pareja, sin que necesariamente haya un embarazo.

Por eso es importante que conozcamos nuestros cuerpos y podamos decidir consciente y responsablemente cuando ser padres o madres.

Los métodos anticonceptivos nos permiten justamente tener cierto control sobre nuestra reproducción y decidir cuantos hijos queremos tener y en que momento.

¿Por qué utilizar métodos  anticonceptivos?

Existen muchas razones que nos pueden llevar a utilizar algún método de control sobre la fertilidad, entre ellas están las siguientes

1. Para dar tiempo a la adaptación psicológica y sexual de la pareja.

Toda pareja necesita un tiempo para conocerse e ir ajustándose tanto emocional como sexualmente uno al otro.

El disfrute pleno de la sexualidad compartida requiere tiempo. Los temores y preocupaciones ante un posible embarazo pueden obstaculizar este proceso.

2. Para evitar el nacimiento de hijos no deseados.

La maternidad y la paternidad son una opción. La decisión de optar por ellos conlleva una responsabilidad muy grande que requiere todo un cambio en nuestras vidas. Para ello debemos estar preparados (as) y dispuestos (as) a asumirla. Todo hijo o hija necesita crecer sanamente, y por eso sólo es posible si vive en un ambiente de aceptación y de seguridad emocional y económica. Es muy importante que su llegada haya sido realmente esperada.

3. Para permitirnos más oportunidades de realización personal.

Muchas veces, un embarazo puede interrumpir la realización de proyectos tan importantes como estudiar o crecer laboralmente. Por eso, muchas parejas sienten la necesidad de planear el nacimiento de los hijos de manera que no interfieran con otros de sus proyectos esenciales.

4. Para evitar riesgos de salud.

En el caso de algunas mujeres que tienen problemas de salud (como padecimientos del corazón, riñones, diabetes, presión alta, etc.) el embarazo y el parto pueden ser peligrosos, empeorándoles su salud o incluso causándoles la muerte.

También el embarazo en jóvenes adolescentes puede ser riesgoso, pues sus cuerpos en desarrollo aún no están totalmente preparados para enfrentar una tarea tan grande.

5. Para espaciar los embarazos.

Los embarazos muy seguidos (antes de dos años) no le permiten a la mujer recuperarse completamente del parto anterior. Esto puede afectar la salud de la madre y la del bebé. También es importante que la madre y el padre tengan tiempo para cuidar y amar a su hijo (a) recién nacido (a), sin la preocupación de un nuevo embarazo.

6. Para evitar el nacimiento de niños (as) con defectos.

La edad recomendada para el embarazo de una mujer es antes de los 35 años, después de esta edad se corre el riesgo de tener hijos (as) con algún defecto. También el hombre o la mujer pueden ser portadores de enfermedades hereditarias.

7. Para tener el número de hijos (as) deseados.

Los métodos anticonceptivos permiten a la mujer y al hombre decidir cuantos hijos (as) desean tener.

Nuestros cuerpos

Para entender bien en que consiste cada método anticonceptivo, es importante conocer como son nuestros genitales.

Empecemos con el cuerpo de la mujer.

Los genitales femeninos constan de dos partes: una externa, que podemos observar con la ayuda de un espejo y otra interna ubicada dentro de nuestro cuerpo.

El siguiente dibujo nos muestra los órganos externos de la mujer.

Este dibujo enseña los órganos genitales internos de la mujer.

Este dibujo muestra los órganos genitales externos del hombre.

Aquí se muestran los órganos genitales internos del hombre.

El ciclo menstrual

Los ovarios son dos pequeños órganos situados cerca de las extremidades de las trompas, y tienen dos funciones:

a) La producción de los óvulos: sólo se da durante la vida fértil de la mujer y durante este período únicamente llegan a madurar entre 200 a 300 óvulos.

b) La producción de hormonas femeninas: estrógenos y progesterona. Bajo la influencia de estas hormonas, cada mes la pared interna del útero o endometrio se engrosa y se prepara para un posible embarazo. Si no ha habido fecundación, esta misma producción de hormonas hace que la capa interna del útero engrosada se desprenda, produciendo la menstruación o regla. Y así vuelve a empezar otro ciclo.

Todo este proceso esta regido por la hipófisis, que es una glándula situada en el cerebro y regula los procesos hormonales del cuerpo.

Como se produce el embarazo

El embarazo se produce cuando se encuentran el óvulo que se madura en uno de los ovarios de la mujer, con los espermatozoides que se producen en los testículos del hombre.

Una vez que el hombre ha introducido el pene en la vagina de la mujer y ha eyaculado (expulsión del semen y espermatozoides) los espermatozoides recorren el útero hasta llegar a las trompas de falopio donde encontrarán el óvulo a fertilizar. Pero esto sólo ocurre en un período específico del ciclo menstrual.

Métodos anticonceptivos

Antes de entrar a describir cada uno de los métodos anticonceptivos que existen en la actualidad, es importante saber que no existe ningún método perfecto, que sea adecuado para todas las edades y en todas las situaciones.

Cada mujer y cada hombre junto con el médico, deben decidir, cuál es el anticonceptivo que le es más adecuado.

Empecemos definiendo entonces los métodos que no son anticonceptivos.

No evitan el embarazo:

Ahora vamos a ver cuales son los métodos anticonceptivos. Para ello debemos distinguir que hay métodos más seguros que otros.

Métodos poco seguros

Los métodos que vamos a ver a continuación, suelen ser poco seguros porque dependen de que conozcamos muy bien nuestros cuerpos y esto no es común que ocurra ni tampoco es sencillo.

Pero si nos animamos a practicarlos debemos estar bien informados (as) y debemos abstenernos de tener relaciones sexuales durante los días fértiles. También tenemos que discutirlos con nuestra pareja para llegar a acuerdos y responsabilidades compartidas.

Ritmo

Este método sólo pueden utilizarlo aquellas mujeres con ciclos menstruales muy regulares (28 a 30 días). Dado que en ciclos regulares la ovulación se presenta entre el día14 y 15 del ciclo y el ritmo consiste en abstenerse de relaciones sexuales durante los días fértiles (4 días antes y 4 días después de la ovulación).

El ritmo no es muy recomendado porque de que limita mucho la espontaneidad sexual, se deben hacer cálculos un tanto complicados.

Para practicarlo correctamente se tiene que apuntar por lo menos durante doce meses las fechas del ciclo menstrual. En la gran mayoría de las mujeres el período más fértil se da en el día número catorce, contando desde el primer día que vino la regla; y a partir de éste se cuentan siete días que son en los que la mujer esta más propensa a quedar embarazada.

El óvulo vive durante 12 horas y los espermatozoides, de 48 a 72 horas en el interior del útero, por lo tanto hay que evitar las relaciones sexuales durante los días de la ovulación.

Método del moco cervical o Billings.

Este método consiste en determinar los días fértiles mediante la observación de los cambios que se producen en el moco cervical.

Después de la regla hay unos días en que no hay presencia de moco cervical.

Luego empieza a aparecer una mucosidad pegajosa que provoca sensación de humedad. Esto significa que ha empezado el período fértil. El moco va volviéndose cada día más elástico y lubricante, estos son los días de máxima fertilidad, después el moco se vuelve más opaco y pegajoso; estos son los días menos fértiles.

Durante los días fértiles debe evitarse la relación sexual. Para usar este método correctamente no deben utilizarse ni preservativos, ni diafragmas, ni cremas espermicidas, DIU o pastilla, pues todos ellos producen alteraciones en el moco, lo que traería confusión.

Este no es método muy seguro, ya que existen varios factores que pueden afectar la aparición o aspecto del moco. El estrés puede retrasar la ovulación o eliminarla de un ciclo; los viajes también pueden atrasarla.

Es una infección u otra enfermedad, el moco cervical aumenta en cantidad o cambia de olor o color. Algunos medicamentos, duchas vaginales y aerosoles, también pueden afectar el uso correcto de este método.

Métodos anticonceptivos  más seguros

Las pastillas anticonceptivas

Es un medicamento compuesto por dos sustancias: estrógeno y progesterona. Son sustancias sintéticas similares a las hormonas femeninas, éstas se expanden a través de la sangre por todo el cuerpo, impidiendo que los ovarios produzcan un óvulo. Por lo tanto, la mujer no puede quedar embarazada.

Las pastillas anticonceptivas utilizadas adecuadamente son muy efectivas, la posibilidad de quedar embarazada es muy escasa, además regulan la menstruación y los sangrados abundantes.

Las mujeres con trastornos circulatorios y cardiovasculares o con padecimientos de várices, vesícula, hígado, algún tipo de cáncer, diabetes, presión alta, problemas del corazón, deberan ser evaluadas por un médico especialista antes de tomar pastillas anticonceptivas.

Las pastillas anticonceptivas se deben tomar siempre bajo estricto control médico. Antes de comenzar con este método debemos informarnos bien, ya que existe diferentes tipos de pastillas anticonceptivas, según concentraciones hormonales y marcas existentes en el mercado.

Los paquetes están compuestos por 21 pastillas. Hay que tomar la primera pastillas al quinto día de la menstruación o regla; contando como día número uno el primer día de sangrado, y las siguientes una por día a la misma hora.

Al terminar el paquete se descansa durante siete días (durante estos días aparece la menstruación), fecha a partir de la cual se debe empezar a tomar el siguiente paquete. Durante la semana de descanso entre caja y caja sigues estando protegida.

Si un día te olvidas de tomar las pastilla a la hora de costumbre, debes tomarte en las doce horas siguientes o tomar dos pastillas al día siguiente a la hora acostumbrada.

Si olvidas tomar la pastilla por más de dos días, el método pierde seguridad, se deberá entonces terminar el paquete, y utilizar un método complementario durante ese mes.

En algunos casos en los primeros tres meses de tomar las pastillas, algunas mujeres sienten mareos o ganas de vomitar, pero estas molestias son pasajeras y poco frecuentes.

Frente a síntomas como dolor en los pechos, aumento de peso, fatiga, sangrado entre regla y regla o disminución del deseo sexual; es mejor consultar al médico para que cambie las pastillas o indique otro método.

Durante el período que se este tomando la pastilla no es conveniente que se tomen medicamentos tales como:

Ampilicina (antibiótico), Rifampicina (antituberculoso), barbitúricos y antiepilépticos. El alcohol en grandes cantidades está contraindicado, todas estas sustancias anulan la acción de la pastilla.

Finalmente, no es recomendable el uso de las pastillas anticonceptivas a partir de los treinta y cinco años, especialmente en mujeres fumadoras y obesas.

Los dispositivos intrauterinos

(DIU)

Los dispositivos intrauterinos son pequeños objetos que se introducen en el útero o matriz, cuya función principal es la de impedir que el óvulo de la mujer se una al espermatozoide del hombre.

Recordemos que el embarazo empieza con la fecundación, o sea cuando el óvulo se une con el espermatozoide.

El DIU impide precisamente esta fecundación.

¿Cómo funciona?

Es un método muy eficaz, seguro, económico y muy cómodo.

El DIU, es uno de los métodos más prácticos ya que una vez puestos, no hay que usar ningún otro método.

Protege ocho años, se puede quitar en cualquier momento y al hacerlo la mujer puede quedar embarazada rápidamente.

El DIU se coloca durante la menstruación entre el segundo y quinto día, esto porque existe la seguridad de que no hay embarazo, además que el cuello del útero está más abierto. El DIU debe ser puesto y retirado por un médico.

Durante los primeros tres meses de colocado es normal que algunas mujeres tengan reglas más abundantes y quizá más molestas de lo habitual, después de transcurrido ese tiempo todo volverá a la normalidad.

Cuando se tiene el DIU es conveniente controlar cualquier pequeña infección vaginal; si se tiene flujo mal oliente o si se siente cualquier ardor en la vagina se debe de ir al médico. Es recomendable visitarlo cada seis meses para que revise si esta bien colocado.

Este método no es recomendado para las mujeres que tienen relaciones sexuales con varios hombres; dado que están más expuestas a contraer enfermedades venéreas y el DIU podría facilitar que la enfermedad se extienda a los órganos genitales internos.

Para las que padecen infecciones vaginales constantes, las que tienen tumores malignos en los órganos sexuales, las que han tenido embarazos ectópicos (fuera del útero), y cuando existen defectos en el útero, este método no es recomendable.

El preservativo o condón

Es una pequeña bolsa de hule lubricada que se coloca en el pene, antes de la relación sexual. Hay que colocarlo de forma que quede espacio en la punta para recoger el semen y evitar así el embarazo.

El condón se pone desde el momento en que le pene está erecto. Una vez que el hombre haya eyaculado es necesario sujetarlo por la base con la punta de los dedos para evitar que se desenrrolle y salga el semen. El condón debe retirarse antes de que haya desaparecido del todo la erección.

Este es un método seguro si se usa correctamente, además que es uno de los poquísimos anticonceptivos que existen para los hombres. Protege contra las enfermedades de transmisión sexual.

El preservativo o condón no produce trastornos en la salud, se consigue en casi todos los establecimientos y cualquier hombre lo puede usar.

Para cada relación sexual se debe usar un preservativo nuevo, no debe inflarse, ni estirarse, debe guardase en un lugar fresco y revisar la fecha en que fue fabricado, si tiene más de cinco años no se debe usar.

Otros métodos anticonceptivos

Existen algunos otros métodos de planificación, que no son muy recomendados, pero que es importante hacer una breve referencia a ellos:

Espermicidas

Son productos químicos en forma de óvulos vaginales, cremas o geles que se introducen en la vagina, diez minutos antes de la relación sexual. La función principal de estos es eliminar los espermatozoides,

Estos fallan en gran cantidad de ocasiones, no es un método muy seguro.

Diafragma

Es una tapita de hule flexibe que se introduce en la vagina, de tal forma que quede cubierto el cuello del útero, debe usarse siempre con una crema espermicida.

Se utiliza en cada relación sexual, debe colocarse diez minutos antes del acto sexual y permanece colocado ocho horas después.

El médico debe recomendar el tamaño apropiado y la manera de colocarlo, es conveniente lavarlo con agua y jabón después de su uso y guardarse seco. Es un método que requiere mucho conocimiento del propio cuerpo y seguridad y experiencia para colocarlo adecuadamente.

Los inyectables

Son compuestos químicos a base de sustancias hormonales, que se aplican por medio de inyecciones intramusculares. Estas evitan la producción de óvulos y espesan el moco cervical, lo que dificulta la entrada de los espermatozoides al cuello de la matriz.

Algunos se ponen cada mes y otros cada tres meses. Es un método muy seguro, pero debe ser recetado por un médico.

La esterilización: un método permanente




La vasectomía

Es una operación muy sencilla: consiste en seccionar o cortar el tubo que lleva los espermatozoides, desde los testículos donde se forman hasta el pene de manera que el líquido que se emana en la eyaculación no lleve espermatozoides.

No tiene efectos secundarios y no interfiere en la relación sexual, ni en la capacidad de erección ni eyaculación.

Ligadura de Trompas

Al igual que la vasectomía se trata de una operación muy sencilla, que consiste en cortar las trompas de falopio, de manera que queda cerrado el paso del óvulo impidiendo su unión con los espermatozoides.

La mujer continúa con su ciclo hormonal, sus reglas y sus óvulos. No interfiere en las relaciones sexuales.

Después de que vos y tu pareja hayan leído y discutido sobre los diferentes métodos anticonceptivos, sus características y sus usos; y lo hayan analizado desde sus propias necesidades, se hace necesario un acercamiento oportuno a los servicios de salud.

Ahora cuentan con suficiente información que les permitirá; orientados por su médico, decidir en forma constante, cuál es le método que les conviene de acuerdo a sus características propias; que sea moderno y altamente eficaz de tal manera que les permita disfrutar plenamente su sexualidad.

La Caja Costarricense de Seguro Social pone a tu disposición los servicios de salud donde debes sentirse en plena libertad y derecho de solicitar información y atención en el momento que lo desees o necesites. Recuerda que es tú responsabilidad el asumir conscientemente tu salud y el ejercicio de tus derechos en relación a ella.