
Vol. 36 (2) Septiembre 2019
REVISTA MEDICINA LEGAL DE COSTA RICA
ISSN 2215-5287
EDITORIAL
El cáncer es una enfermedad conocida ampliamente en la sociedad, que de manera
simplificada se podría describir como la transformación maligna de cierto tipo de células en
un órgano o un tejido humano; que si no es detectada tempranamente, se esparce hacia sus
lados, luego hacia otras regiones mas alejadas del cuerpo, hasta finalmente comprometer
órganos y sistemas vitales para el organismo.
Hago alusión a esta enfermedad, porque de forma analógica, es como los médicos forenses
hemos visualizado el crimen organizado en la sociedad actual. Este mal, se ha instaurado
de manera silenciosa en nuestra población, pasando desapercibido por muchos años; en sus
inicios, ocasionando problemas que no parecían importantes o que fueron ignorados, pero
que con el tiempo, ha logrado extenderse ampliamente a muchos rincones de nuestra
sociedad: instituciones estatales, comunidad laboralmente activa y productiva, familias, en
general hombres y mujeres desde niños hasta adultos.
El crimen organizado se ha infiltrado en nuestra sociedad, ha carcomido lo profundo de
nuestra cultura latinoamericana, ha afectado las bases de nuestros valores y finalmente
produce en la actualidad, día con día, muertes y toda clase de violencia social. Y que estamos
haciendo al respecto?
Como médico, he sido testigo de la importancia con que los gobiernos apoyan la prevención
y el tratamiento del cáncer: seminarios y capacitaciones, extensas campañas de prevención,
integración de equipo material y humano especializados en esta materia, infraestructura
designada para ello y hasta aplicación de vacunas para su prevención.
Ello, nos hace cuestionarnos si los gobiernos de latinoamérica estarán considerando y
abordando el crimen organizado con esta misma trascendencia.
El Congreso Internacional sobre Crimen Organizado que tendra lugar en Costa Rica el 23 y
24 de agosto del presente año, obedece a la preocupación de un pequeño grupo de científicos,
los médicos forenses, que día con día observamos en las mesas de autopsia cadáveres de
hombres, mujeres y muchos adolescentes, que fueron asesinados por temas relacionados al
crimen organizado.
Es nuestra esperanza, de que este espacio, en el cual confluyen autoridades de toda
latinoamérica, autoridades de gobierno, especialistas de la investigación policial y científicos