Editorial
 
 
A propósito de la falsa privatización del seguro social
 
 
 

Con afán politiquero un precandidato del partido Liberación Nacional ha tratado de enlodar los logros obtenidos por la Caja Costarricense de Seguro Social. Los periódicos de estos días se han ocupado de artículos distorsionados para hacer aparecer las gestiones de nuestros funcionarios de la Caja Costarricense de Seguro Social, como si solapadamente estuvieran privatizando la principal institución de salud. Por otro lado lo que hacen es azuzar los sindicatos, poco conscientes de la verdadera realidad del asunto, para formar una efervecencia sin sentido en sus actitudes.

Diríamos que nada más ilógico puede ser este pensamiento cuando de privatizar las instituciones del Estado, las últimas que se llegarían a privatizar serían las de salud y las de educación. Hansido conquistas de un enorme valor de nuestros gobernantes y la tónica de los estadistas alrededordel mundo, ha sido proteger bajo un marco social, la salud y la educación de sus habitantes.

A pesar de que la politiquería costarricense ha hecho de la mentalidad en el costarricense de un pánico y de un odio a todo lo que es privatizar. Sí pensamos que ciertos servicios del Estado deberían privatizarse, aunque nos cuesten más caro al bolsillo de los ciudadanos. La burocracia, los privilegios desmedidos y la corruptela, han desvirtuado los principios de eficiencia de nuestras instituciones estatales. No hay presupuesto que alcance para tanta irregularidad y vicios, que se vienen gestando en las tres últimas décadas. Cada día nos hundimos más, pues los economistas no encuentran la fórmula para poder pagar la deuda interna.

Si por algo se ha preocupado el gobierno del Señor Presidente Rodríguez Echeverría ha sido la expansión de los servicios de Educación y de Salud. Como es natural la Caja ha tenido que comprarservicios adicionales, pues ha habido presas: de citologías vaginales, de cirugías programadas,de procedimientos diagnósticos de gabinete, de enfermos marginados por la salud en lugares lejanos y de enormes filas para consultas, etc. etc.

El equipo de personal gerencial del Lic. Rodolfo Piza Rocafort, ha sido incisivo y con progreso de

avanzada. Su labor ha sido encomiable a pesar de que las cuotas del asegurado no hayan subido

en décadas, vemos un progreso admirable en toda su gestión. El aporte del Gobierno Español ha sido también muy valioso.

Muchos colegas médicos se han beneficiado al trabajar horas extras por las tardes y por las noches, otros profesionales sin plaza fija han podido subsistir al sacar trabajo rezagado y así darle mayor provecho a la Institución y al usuario del Seguro. Las citas para el oftalmólogo, para ungastroscopía, para una operación, etc., no serán a varios meses plazo, sino, con mayor prontitudy oportunidad para el mal que sufre.

Hemos podido observar la entrega de equipos valiosos a hospitales periféricos y sustituir equipos obsoletos a nivel central. Implementar políticas de mayor eficiencia e ir suprimiendo la duplicación de los servicios de salud, al haber un mejor entendimiento de la Caja con el Ministerio de Salud.

No nos ceguemos con falsos conceptos. Al Dr. Enrique Lobo Hernández cirujano distinguido y emprendedor, se le asignó la tarea de la cirugía vespertina. Lo vemos que después del pesado trabajo de la mañana en el Hospital San Juan de Dios, rehabilitar salas de operaciones y personal adicional para las tardes, se desplaza a hospitales de provincia a preparar cirujanos en procedimientos más complejos y así se puedan hacer cirugías programadas a todas horas de las tardes y a veces en las noches. Estos alicientes son de enorme costo para la Caja y de enorme esfuerzo para los profesionales médicos, pero de un enorme valor para el asegurado sufriente y resignado a largas esperas.

Señores... con estas pocas evidencias tan notorias y tan significativas, cómo podemos hablar de privatizaciones imaginarias y de falsos conceptos en las economías de prestaciones médicas?

Basta observar los grupos integrados de atención básica o primaria que cada día van penetrando hasta los confines de nuestro territorio, para darnos cuenta de la agresividad de nuestros programas de buena intención social de la Caja. Por favor, no veamos fantasmas donde no existen!

Hagamos políticas de salud y no politiquería...
 

 
Dr. Manuel Zeledón Pérez
Director