TÉCNICAS
Anatomía de quirúrgica
de la arteria vertebral, segmento distal intradural
Dr. Manuel S. Gadea Nieto*
Artículo
recibido: 15 de marzo 2000 - Aprobado: 31 de marzo 2000
Abstract
The microvascular surgical anatomy of the vertebral (distal and intradural),
posteriorinferior cerebellar arteries, and the vertebrobasilar junction
is variable. It is very important to develop anatomic guidelines for
aneurysms surgery in this region.
The left vertebral artery is dominant with a greater blood flow than
the right vertebral, thus why there is a major incidence in aneurysms formation
in the left circulation, with roaughly a female (2:1) predominance.
Review of the microvascular surgical anatomy was done having in mind
the extensile dorsolateral suboccipital approach.
Key words: Surgical anatomy, microvascular anatomy, vertebral
artery, posteriorinferior cerebellar artery, vertebrobasilar junction.
Introducción
Los aneurismas localizados a la región que involucro a las arterias
vertebral (AV)-segmentos distal e intradural-, arteria póstero-cerebelosa
inferior (PICA) y la unión vértebro-basilar (VB) tienen una
incidencia alrededor del 3 al 10% de todos los aneurismas intracraneanos;
en nuestra serie, éstos comprenden tan solo el 4.8%. Según
las distintas series existe un ligero predominio en pacientes femeninos (2:1)
y su edad de presentación oscila entre los 35 y los 55 años
de edad (1, 2, 3, 4, 5, 6, 7,
8, 9, 10). La
mayoría de los aneurismas tiene un diámetro < de 1 cm (2, 5, 10), presentándose con
hemorragia subaracnoidea hasta en un 90% de los casos (6,
7, 10). En términos
generales la distribución del tipo de lesión es del 60% de
seculares, 20% de fusiformes y 20% de disecantes (3, 10).
Resumen
La anatomía quirúrgica microvascular de las arterias vertebral
(distal e intradural), póstero-cerebelosa inferior y de la unión
vértebro-basilar es muy variable, por lo que es muy importante delinear
algunas guías para la cirugía de aneurismas de estas localizaciones.
La arteria vertebral izquierda es dominante, llevando un mayor aporte
sanguíneo que la del lado derecho, ocasionando mayor incidencia
de aneurismas de ese lado, con una mayor incidencia en mujeres (2:1).
Revisamos la anatomía quirúrgica microvascular teniendo
en mente el abordaje dorsolateral suboccipital ampliado.
Palabras claves: anatomía quirúrgica, anatomía
microvascular, arteria vertebral, arteria póstero-cerebelosa inferior,
unión vértebro-basilar.
Desde la primera descripción clínica de un aneurisma sacular
de la AV-PICA por Cruveilhier en 1829 hasta Drake y los avances en microcirugía
(Rand), estas lesiones se manejaban invariablemente con métodos indirectos
y no es sino hasta la adquisición de claros conceptos en cirugía
de la base, microcirugía y sobre todo, gracias a un mejor entendimiento
de la anatomía quirúrgica microvascular, que estas lesiones
han sido tributarias de un manejo directo y con muy baja morbi-mortalidad.
Anatomía
quirúrgica microvascular
Arteria vertebral (AV) segmentos
distal e intradural
Las AV están presentes en el 98% de las personas,
siendo las primeras ramas de las arterias subclavias, el segmento distal
corre alrededor de la masa lateral del atlas en la muesca horizontal sobre
el arco posterior de C 1, gira ántero-superiormente hasta alcanzar
la membrana atlanto-occipital y penetrar la dura en la cara lateral del
agujero magno (figura 1), a unos 15 mm de la línea
media. La envoltura de periostío del vaso se continua con la
dura intracranialmente unos 4 a 6 mm. Este segmento además
está envuelto en un denso plexo venoso y origina ramas meníngeas
y otras anastomóticas con el sistema carotídeo a través
de la arteria occipital y algunas veces, con la carótida externa
directamente.
El segmento intradural promedia unos 2.5 mm de diámetro, siendo
el lado izquierdo el dominante en el 40% de las veces, en el 30% el derecho
es el dominante y en el restante 30%, los vasos son simétricos.
Rara vez la AV es hipoplásica o fenestrada alrededor de los nervios
craneanos inferiores, pero si cualquiera de estas circunstancias ocurre,
la incidencia de aneurismas es más alta. En promedio la AV lleva
un flujo sanguíneo por minuto de unos 150cc.
La AV ingresa en la cisterna peribulbar y de ahí se dirige ántero-medialmente
a lo largo de la región lateral del bulbo, inmediatamente caudal
al surco olivar posterior; sigue un recorrido rostral en la pequeña
fosa lateral de la muesca olivar superior; al alcanzar el surco ponto-bulbar
se une a la AV opuesta, anterior a la superficie rostral del bulbo, formando
la unión VB y dando origen a la arteria basilar (AB), que yace inmersa
en la cisterna prepontina. En la mayoría de los casos, las
ramas arteriales bulbar lateral, espinal anterior y PICA se originan a lo
largo del recorrido de la AV. Las arterias espinales se originan en
forma simétrica de la porción medial de las AV, uniéndose
a nivel de la cisterna prebulbar (figura 2).
PICA
La PICA es la más larga y distal de las ramas de la AV, aunque
en algunas ocasiones se origina en el segmento distal de la misma y en
otras puede originarse del tronco basilar (AB); se origina como un tronco
único hasta en el 97.6% de las veces, como un tronco doble en el
2.4% (11, 12), pudiendo estar ausente
en un 4% de los casos (1). Aunque su origen es inconstante,
en la mayoría de los casos se encuentra unos 10 mm arriba del agujero
magno y 15 mm proximales al nacimiento de la AB, en la cisterna bulbar
anterior. Su diámetro oscila entre 1.2 y 1.7 mm, llevando
en promedio un flujo sanguíneo de 60 a 85 cc/minuto (figura 2, 3).
En el 38% la PICA pasa entre las raíces del XI par, en el 30.95%
entre el X y el XI pares, en el 23.80/ entre las raíces del X par
y en el 4.76% pasa rostral al IX par; solamente en el 2.4% de las veces
la PICA pasa entre el IX y el X par (figura 2,
3).
La PICA tiene cinco segmentos: bulbar anterior, bulbar lateral, bulbo-amigdalino,
telovelo-amigdalino y cortical (2). El segmento bulbar
anterior se localiza frente al bulbo, iniciando en el origen de la PICA,
íntimamente relacionado con el hipogloso. La arteria se dirige
en sentido superior hacia o a través del hipogloso para en sentido
posterior dar origen al segmento bulbar lateral, el que corre cerca del bulbo,
extendiéndose hacia el origen de los nervios craneales IX, X y XI,
en su extensión caudal, alrededor de la cara inferior de la oliva,
irrigando la parte lateral. del bulbo. Esta extensión caudal
da origen al segmento bulbo-amigdalino, el que forma un bulce alrededor de
la amígdala cerebelosa; este bucle caudal se extiende unos mm por
debajo de la amígdala en el agujero magno en un tercio de los pacientes.
Siguiendo a los pares craneales, IX, X y XI aparece el bucle craneal, que
corresponde al segmento telo-velo-amígdalino, corriendo en la hendidura
entre la tela coroídea y el velo bulbar inferior rostralmente y superior
al polo de la amígdala cerebelosa caudalmente. Cuando la PICA
alcanza el velo bulbar posterior da ramas para la irrigación del
plexo coroide del cuarto ventrículo y la amígdala. Tanto
el segmento bulbo-amígdalino, como del telo-velo-amigdalino se originan
un sinnúmero de ramas que irrigan el bulbo (ramas bulbares posterolaterales).
El segmento telo-veloso-amigdalino pasa entre la amígdala y el vermis
para formar el segmento cortical. En un 88% la PICA se bifurca en
un tronco medial y otro lateral; el tronco medial irriga el vermis y la
superficie adyacente del hemisferio cerebeloso ipislateral, mientras que
el tronco lateral irriga la superficie adyacente del hemisferio cerebeloso
ipsilateral, mientras que el tronco lateral irriga la superficie cortical
de la amígdala y el hemisferio cerebeloso, en su porción inferior.
La PICA y la arteria cerebelosa ántero-inferior (AICA) comparten territorios
de distribución vascular al irrigar los hemisferios cerebelosos.
La PICA da origen a arterias coroideas, perforantes y corticales, éstas
se dividen a su vez en grupos: vermianas, amigdalinas y hemisféricas
(11, 12) (figura
2).
Una relación importante desde el punto de vista microquirúrgico
de la PICA es con los nervios craneanos, como se hizo mención anteriomente
(11).
Aunque por regla general, la PICA es un vaso par, hay que tener siempre
presente que la anatomía de estos vasos es muy variable.
Unión VB
Una vez que las AV se encuentran dentro del espacio intradural, ascienden
desde la superficie lateral inferior hacia la ántero-superior del
bulbo, dividiéndose a este nivel en segmentos bulbares lateral y anterior.
El segmento bulbar lateral inicia en el agujero dural y pasa hacia delante
y hacia arriba de la superficie bulbar lateral, terminando en el surco
preolivar. El segmento bulbar anterior comienza en el surco preolivar,
corre frente o entre las raíces del hipogloso (XII par) y cruza la
pirámide alcanzando su homóloga contralateral, en o cerca
del surco ponto-bulbar, formando la AB (VB), localizada aproximadamente
1 cm de la unión bulbo-protuberancial; su diámetro se aproxima
al de la arteria carótida interna, siendo en promedio entre 2.7 y 4.3
mm, con un flujo sanguíneo por minuto por unos 300 cc. En sus cursos
ascendentes la superficie anterior y medial del segmento bulbo-lateral se
relacionan con los cóndilos occipitales, los canales del hipogloso
y los tubérculos yugulares. El segmento bulbar anterior "descansa"
en el clivus (11, 12) (figura 2, 4)
Figura 4
Discusión
Es importante recalcar que gran parte de la disección de los
aneurismas localizados en esta área se debe de realizar a través
de las raíces de los nervios craneanos IX, X y XI; una mínima
tracción o una aspiración inadvertida pueden producir disfagia,
disartria y dificultad para la deglución, entre otros síntomas
(13) (figura 2, 3, 5, 6).
Esta región tiene la particularidad de que es asiento de lesiones
tanto seculares, como fusiformes, como dilataciones ectásicas.
Las lesiones originadas en el origen de la PICA se relacionan frecuentemente
a trauma, con la subsecuente disección arterial.
Usualmente los aneurismas seculares tienen su origen unos mm distases
al origen de la PICA, conforme crecen, la base se ensancha e incorpora
el origen de la PICA. Debido a la tortuosidad anatómica comúnmente
observada en la AV, el origen de la PICA (y los aneurismas) se localizan
en la línea media o transversalmente a ella. Los aneurismas
localizados distales a la PICA y proximales a la confluencia de las AV no
son frecuentes, sin embargo, a este nivel es más frecuente encontrarse
lesiones fusiformes bizarras (figura 4, 5, 6).
Los puntos de ramificación de la PICA distal son asiento de aneurismas,
particularmente en situaciones de flujo alto como en el caso de una malformación
arterio-venosa cerebelosa asociada. Los aneurismas gigantes usualmente
se originan en el segmento bulbo-lateral de la PICA.
Un tipo especial y difícil de manejo quirúrgico son los
denominados serpiginosos, localizados a los segmentos distal e intradural
de la AV, aunque pudiendo extenderse hasta la AB.
Los aneurismas de esta localización son un tipo distinto de enfermeda
cerebrovascular. En la evaluación de cada caso en particular,
es muy importante tomar ventaja de las vías naturales de revascularización
que se tiene en esta área; además, hoy en día se tiene
la posibilidad de tratar estos pacientes con terapia endovascular o bien,
con terapéuticas combinadas.
El conocimiento de la anatomía quirúrgica microvascular,
la comprensión de las variantes existentes y el dominio de las técnicas
en cirugía de base de cráneo, permitirán el manejo
adecuado y satisfactorio de estas lesiones no frecuentes (figura 7).
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Reconocimiento
A la Licda. Alejandra Duque Estrada Ortiz por su trabajo artístico.
Agradecimiento
A la Dra. Ana E. Montiel R., por su asociación quirúrgica
y académica durante los últimos años.
* Socio Activo, Sección
Conjunta de Cirugía Cerebrovascular, Asociación Americana
de Cirugía Neurológica, Cosnejo Americano de Cirugía
Neurológica
Apdo. 818-1 100 Tibás. San José. Costa Rica.
E-mail: gadeanms@hotmail.com