Evolución Histórica de los
medicamentos no incluidos en
la Lista Oficial (claves) de la CCSS.

Dra. Desirée Sáenz Campos, PhD.


Dpto. Farmacoterapia CCSS; Escuela de Medicina UCR.
Grupo Estudio de Utilización de Medicamentos: CCSS-UCR (Proyecto VI-422-A0-138).

Correspondencia: Dpto. Farmacoterapia CCSS, oficinas centrales piso 12, teléfono (506) 2221878, 295-2263, fax (506) 295-2905

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Recibido el 02 de setiembre de 2002.



Resumen

En el contexto de la Seguridad Social de Costa Rica se cuenta con la Lista Oficial de Medicamentos (LOM), que traduce la selección de los fármacos necesarios para atender las necesidades sanitarias de la población asegurada. Como un mecanismo para dar resolución a necesidades excepcionales de medicamentos, se dispone de la opción para gestionar claves de autorización para medicamentos no LOM a cargo institucional.

El objetivo de esta presentación es exponer una breve reseña de la evolución histórica de las claves, con base en la información contenida en los archivos disponibles y las base de datos.

La alternativa del sistema de claves para medicamentos no LOM se ha documentado desde 1985, cuando se otorgaron 387 claves. La confirmación de un constante crecimiento de las claves confirma la vigencia de esta alternativa a lo largo de los años, hasta llegar a 3848 claves durante el año 2001, aunque la gran mayoría de los productos autorizados a la fecha ya están incluidos en la LOM. Durante el primer semestre de 2002, los medicamentos más solicitados fueron Angiotensina II, Capecitabina, los inhibidores de Aromatasa (letrozol y otros) y la Amifostina.

Se concluye que la opción de brindar medicamentos no LOM a cargo institucional a una minoría de pacientes tributarios, que por su condición clínica diferencial o por la excepcionalidad de su diagnóstico no está cubierto, constituye un recurso real en procura de asegurar una intervención farmacológica eficaz y segura a los pacientes.

Palabras clave: Medicamentos, fármacos, Lista Oficial de Medicamentos.

Introducción

En el entorno de la Seguridad Social se cuenta con un formulario denominado Lista Oficial de Medicamentos (LOM) que, en su versión 2002, incluye más de 600 productos para uso en el ámbito institucional (1). Con los productos incluidos en esta LOM se ofrece cobertura farmacológica ante las necesidades de la población atendida por los médicos de la CCSS, en el contexto de la práctica clínica habitual. No obstante, ocasionalmente se atienden pacientes con patologías excepcionales (poco frecuentes o raras) o con características muy especiales, lo cual podría generar en el médico tratante la necesidad de recurrir a un fármaco no incluido en la LOM (2).

En 1991, tras varios años de ofrecer esta opción en procura de maximizar el beneficio al paciente, al iniciar la década de los noventa se dispuso un primer mecanismo para diferenciar la gestión de las solicitudes de tratamiento agudo del crónico con medicamentos no LOM a cargo institucional (3).

Años después, en 1999, ante una demanda creciente en torno a la sistematización de la información y, entre otras cosas, porque el proceso es auditable dado el origen del financiamiento de la compra de cada medicamento; se emitió una nueva normativa mediante la cual, las solicitudes para tratamiento agudo o crónico con medicamentos no LOM a cargo institucional siguen gestiones diferenciales para su autorización (4).

Como complemento del proceso de sistematización y para brindar una documentación sistemática de la información clínica que permite y justifica la decisión (5), en el año 2001 se implementó un formulario para que los médicos procedan de forma estandarizada con su solicitud de medicamento no LOM para tratamiento agudo, aplicable a todo nivel dentro de la institución (6).

En un número previo (2) se había publicado un informe sobre un diagnóstico situacional de las autorizaciones para tratamiento agudo, las cuales son conocidas como claves agudas, con énfasis en los hallazgos correspondientes al primer semestre del 2000.

En este momento, con el presente documento se pretende ofrecer una breve reseña sobre la evolución histórica de las autorizaciones de medicamentos no LOM.

Procedimiento

En la Biblioteca local, se hizo una compilación y revisión individual de todos los documentos de registro de claves disponibles en el Departamento de Farmacoterapia (a partir de 1985). Se registró el acumulado anual para establecer el número correspondiente de claves autorizadas durante el periodo, se documentó el nombre e información relacionada de los medicamentos y se comparó con la LOM 2002 para fundamentar las inclusiones. Además, se revisó el Informe semestral de medicamentos no incluídos en la LOM-1-2002, el nombre de los medicamentos y grupos farmacológicos más solicitados como clave.

Resultados

El primer registro disponible data de 1985 con 387 claves autorizadas a cargo institucional, la primera clave registrada fue otorgada a una paciente de la Clínica Dr. Marcial Rodríguez, para Espiramicina (Provamicina, por su nombre registrado) noventa tabletas; actualmente, este medicamento se encuentra incluido en la LOM con una potencia de 500 mg. En el curso de ese año destacó las múltiples claves para calcio oral, espiramicina y betanecol. Entre otros productos, se dieron claves en menor cantidad pero representativas de necesidad, fueron: albúmina 25%, miconazol ungüento, aciclovir oral, aciclovir parenteral, cefalosporinas de III generación (especialmente cefotaxima), verapamilo y fluouracilo 5%; todos éstos ya han sido incluidos en la LOM.

En el año de 1986, la primera clave fue por 20 cápsulas de aciclovir para un paciente atendido en el Hospital México; se documentó que tenía Herpes Zóster diseminado y era portador de Linfoma de Hodgkin como patología de fondo. Ese año culminó con el otorgamiento de 336 claves para diversos fármacos, 51 claves menos que el año anterior.

El año 1997 inició con una primera clave de Amiodarona 100 ampollas para un paciente atendido en el Hospital San Juan de Dios; actualmente, este medicamento se encuentra incluido en la LOM en forma de preparado para uso oral y para uso parenteral. El número de claves de ese año fue de 590 y, a partir de entonces se mostró un crecimiento persistente durante los años siguientes.

El número anual de claves creció progresivamente hasta 1992 cuando hubo 1240 claves; luego, tras un descenso temporal durante los años de 1993 (1015 claves) y 1994 (896 claves), de nuevo se incrementó. Es decir, a partir de 1994 como referencia, persiste en constante crecimiento hasta la fecha (Figura 1).

En el primer semestre del año 2002, el mayor número de claves para tratamiento fue otorgado para pacientes tributarios de tratamiento crónico (mayor de 3 meses) con fármacos inhibidores del receptor de Angiotensina II, Capecitabina, Inhibidores de Aromatasa (letrozol y otros) o Amifostina.

 


Discusión

El análisis cuantitativo del comportamiento histórico de las autorizaciones (claves) para medicamentos no LOM pone en evidencia que esta alternativa ha constituido un recurso viable durante más de quince años. Ciertamente se tienen disponibles los medicamentos mediante la LOM para atender las necesidades de la población; no obstante, como una opción real se mantiene para atender la necesidad excepcional de múltiples pacientes.

El perfil cuantitativo demuestra un comportamiento positivo hacia el constante crecimiento, con un primer ascenso destacado en 1992, el año siguiente a la circulación de la primera Circular que normaba las solicitudes, seguido inmediatamente por una tendencia decreciente temporal durante los 2 años siguientes; luego vuelve a mostrar el comportamiento positivo hasta evidenciar un mayor aumento en el registro de claves durante el año de 2000, hecho que ocurrió después de la circulación masiva de una Circular con el procedimiento normatizado por la Gerencia Médica (4).

Sin embargo, el último ascenso también puede relacionarse con una situación que usó esta vía como parte del plan de contingencia, dada la excepcionalidad en la historia institucional que se derivó del faltante temporal de medicamentos en los años1999/2000, pues durante ese periodo por sugerencia jerárquica se empleó, entre otros, este mecanismo para atender con prontitud la necesidad de suplir medicamentos a nivel institucional.

En cuanto al registro de 3848 claves durante el año 2001, otro evento influye de forma coyuntural en su magnitud. En setiembre de ese año, se implementó la Acreditación para autorización local de medicamentos no LOM a Comités Locales de Farmacoterapia en los hospitales nacionales, abarcó 21 medicamentos no LOM con indicaciones específicas (7). Como los hospitales nacionales son los centros de atención médica con mayor cantidad de solicitudes para medicamentos no LOM (2,5), la resolución de tales gestiones respecto a los 21 medicamentos acreditados se delegó al nivel local y, desde entonces, su registro compete a esa instancia. Esto fue un evento que sin duda alguna contribuyó, al menos durante el último cuatrimestre del año, con el inicio de una disminución progresiva de las claves a nivel central durante el periodo evaluado. Entonces, en comparación con el año previo se otorgaron relativamente menos claves (+439 claves) que entre los años 1999-2000 (+1081 claves).

Por otra parte, aunque no es el objetivo del presente trabajo, cabe citar que un examen exhaustivo de las autorizaciones individuales hace permisible la predicción de los medicamentos candidatos a ingresar a la LOM. A partir del año de 1985, el lugar más destacado lo obtuvo el calcio oral, el cual se puso a disposición institucional en febrero de 1995 (8). Más recientemente, para el primer semestre del año 2000 los cinco productos con mayor cantidad de solicitudes, en su calidad de medicamento no LOM, fueron Heparina de Bajo Peso Molecular, Octreótida, Factores Estimulantes de Colonias Granulocíticas y Sevoflurano (2,5), todos los cuales se encuentran incluidos en la LOM (1). En estos momentos, medicamentos como los inhibidores del receptor de Angiotensina II, Capecitabina, los inhibidores de Aromatasa (letrozol y otros) y la Amifostina son los que encabezan la demanda farmacológica actualmente descubierta por la LOM.

Este cambio de perfil cualitativo es previsible, en respuesta al dinamismo inherente a la terapéutica farmacológica que conlleva una constante revisión y actualización de la LOM. Conforme pasa el tiempo, la necesidad de productos no LOM varía y, en efecto, se dirige hacia los nuevos medicamentos disponibles en el mercado y hacia los medicamentos que sirven para atender la necesidad de pacientes con patologías infrecuentes o excepcionales, precisamente aquellas que la capacidad diagnóstica institucional permite identificar y dar seguimiento, junto con otros menos novedosos pero con un consumo marginal (por ejemplo: Vitamina E).

En conclusión, la LOM cubre las necesidades farmacológicas para la atención del proceso salud-enfermedad de la gran mayoría de las personas que se atienden en la Seguridad Social de este país. La opción de brindar medicamentos no LOM a cargo institucional dentro del ámbito de sus posibilidades financieras, complementa el aseguramiento del acceso a medicamentos especiales para una minoría de pacientes tributarios, debido a su condición clínica diferencial o por la excepcionalidad de su diagnóstico. Esta opción constituye un recurso real para atender una necesidad y asegurar la procura del beneficio con una intervención farmacológica eficaz y segura.

Referencias

1. Comité Central de Farmacoterapia-Departamento de Farmacoterapia: Lista Oficial de Medicamentos 2002. San José: Caja Costarricense de Seguro Social, 2002: 203.

2. Sáenz-Campos D, Blanco A, Mora-Rojas L, Tinoco Z.: Medicamentos no incluidos en la Lista Oficial de la CCSS: claves para tratamiento de patologías agudas. Fármacos 2001, 14(1): 49-60.

3. Falcón E.: Circular 17585 Prescripción de medicamentos no incluidos en la Lista Oficial a nivel de Consulta Externa para el tratamiento de enfermedades crónicas (29 de julio de 1991). Departamento de Farmacoterapia, Caja Costarricense de Seguro Social.

4. Ferraro F.: Circular 6599: Normas Solicitud de medicamentos no incluidos en la Lista Oficial de Medicamentos (22 y 26 de abril 1999). Gerencia de División Médica, Caja Costarricense de Seguro Social.

5. Sáenz-Campos D.: Diagnóstico situacional y propuesta de un sistema de gestión para fármacos no incluidos en la Lista Oficial de Medicamentos de la CCSS para tratamiento agudo. Tesis de Maestría, Universidad Santa Lucía, San José, 2001.

6. Chaves A.: CCF-0988-07-2001 Formulario para solicitud de medicamentos no incluidos en la Lista Oficial para tratamiento agudo (claves agudas) (24 de julio de 2001). Comité Central de Farmacoterapia, Caja Costarricense de Seguro Social.

7. Chaves A.: CCF-11-41-08-01 Acreditación de Comités Locales de Farmacoterapia, Adquisición de medicamentos no incluidos en la Lista Oficial para tratamiento agudo o crónico (30 de agosto de 2001). Comité Central de Farmacoterapia, Caja Costarricense de Seguro Social.

8. Chaves A.: Circular 001102 Ampliación de usos de calcio a nivel institucional (17 de diciembre de 1998). Comité Central de Farmacoterapia, Caja Costarricense de Seguro Social.