Educación de los adultos mayores diabéticos,
en una clínica de atención ambulatoria
 
 
M.Sc. Inés Clarke Spence *
 
 
 

RESUMEN

Se realizó un estudio de tipo cualitativo, mediante la técnica de grupo focal, con seis adultos mayores diabéticos que fueron catalogados, por el equipo de salud que les imparte educación, como pacientes que han permanecido con las cifras de glicemia elevadas por no seguir el tratamiento, a pesar de que acuden a la clínica de atención al diabético, en la cual se brinda educación acerca del control de la enfermedad. Además, un familiar de cada uno de estos seis diabéticos participó en otra sesión con la misma técnica, sin la presencia de los adultos mayores. La entrevista semiestructurada fue otra técnica que se empleó, para la recolección de la información de los miembros del equipo de salud. Se plantearon los siguientes objetivos generales: 1° Analizar el enfoque educativo actual, aplicado en la enseñanza de las personas mayores diabéticas y su familia en la Clínica. 2° Proponer un enfoque educativo que permita la participación activa del adulto mayor diabético, junto con su familia, en el proceso de aprendizaje para favorecer la consecuente adhesión al tratamiento indicado.

Entre los resultados, se destaca que el enfoque educativo actual emplea una técnica magistral que se caracteriza por poca participación de los diabéticos y ausencia de los familiares en las sesiones educativas, éstas son monótonas y sin motivación. En cuanto a las barreras que limitan la participación activa del adulto mayor diabético y su familia en el tratamiento de la enfermedad, se menciona la planificación del proceso educativo al margen de las necesidades reales de los diabéticos y la familia. Los métodos utilizados en la educación del adulto mayor diabético y su familia, para facilitar el proceso de toma de decisiones en cuanto a la necesidad de modificar sus hábitos y su estilo de vida, no están claros para los diabéticos, excepto para una que lo percibió en forma negativa.

INTRODUCCIÓN

La educación es un proceso continuo y permanente mediante el cual el ser humano busca desarrollarse integralmente, inmerso en el ambiente familiar, social y material, para lograr una mejor calidad de vida.

Todo paciente diabético tiene que ser capacitado para que desarrolle conocimientos sobre su enfermedad y se motive hacia el cambio de actitudes, que permitan transformar positivamente el estilo de vida, tome conciencia de su responsabilidad en el control de la enfermedad (Beebe y otros, 1991). Dicho control consiste en cumplir la dieta, incorporar actividad física en la rutina diaria y valorar la importancia de tomar medicamentos o administrarse la insulina. Por lo tanto, el aprendizaje tiene que ser continuo y progresivo.

Las necesidades educativas de los adultos mayores son muy complejas, por su edad, el riesgo de complicaciones, y porque tiene que asumir, el cuidado de una enfermedad crónica. Por lo que, el equipo de salud, como facilitador, debe desempeñar un papel preponderante en la educación de los adultos mayores diabéticos, para que sigan el tratamiento, logren prevenir las dificultades y mejoren su calidad de vida. Para cumplir con esta tarea, el educador necesita dominio de las técnicas educativas más actuales y escoger la o las que mejor se adapten a las necesidades de las personas mayores. Al hablar de técnicas de enseñanza, se refiere a todas aquellas formas racionales de utilizar tanto los medios como los materiales que van a apoyar el aprendizaje (Meeks, 1980).

Lo anterior se justifica, por cuanto en las dos últimas décadas, América Latina ha sufrido cambios desde el punto de vista demográfico, epidemiológico y sobre todo social, los cuales han provocado un aumento en la incidencia y prevalencia de varias enfermedades crónicas no transmisibles, entre las cuales se puede mencionar la diabetes. En la actualidad, se considera que todas esas afecciones son responsables, directa o indirectamente, por la gran mayoría de muertes y discapacidades en la región (Alleyne, 1996).

Se calcula que hay en el mundo alrededor de 143 millones de personas que padecen de diabetes. En Costa Rica, existen 94 377 diabéticos declarados. El equipo de medicina interna del Hospital México calcula que, en el país, pueden haber unas 630 000 personas con riesgo de padecer el mal (INCIENSA, 1999).

En la población mayor de 15 años, se estima que la prevalencia de diabetes es de 4 a 6% y aumenta a 14% en individuos de 60 años y más (Caja Costarricense de Seguro Social, s.f.). En este último grupo, la diabetes representa el 5,7% de las consultas. Entre 1985 y 1990, los egresos por diabetes mellitus aumentaron de 3, 2% a 4% en los varones, con lo cual se desplazó del quinto al tercer lugar. Para las mujeres se redujo de un 8,3% a un 7,5%, pero continúa ocupando el primer lugar como causa de hospitalización. En 1990, el 6% de los egresos de la CCSS se debió a complicaciones de la diabetes mellitus. La edad promedio de quienes fallecen a causa de esta enfermedad es de 63. 1 años en la mujer y de 57.4 años en el hombre; para la población diabética en general, es de 61 años (CCSS, 1993). La atención a estos pacientes por complicaciones representa un gasto enorme para el país. Según datos de INCIENSA (1999) cada diabético hospitalizado representa un costo de, ¢550.464. - para el país.

Los diabéticos se hospitalizan 1,97 veces más que los otros enfermos. No obstante, dichas complicaciones se pueden prevenir o al menos disminuir mediante prácticas educativas donde participe el paciente y su grupo familiar.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Para este estudio se planteó el siguiente problema:
¿Cuál sería el modelo educativo que corresponda a las características y necesidades del adulto mayor diabético y su familia, para que participen activamente en el proceso de aprendizaje y favorezca la consecuente adhesión al tratamiento indicado?

DISEÑO DEL MÉTODO

Tipo de investigación

Esta investigación se desarrolló dentro de un enfoque cualitativo, que permitió a los adultos mayores diabéticos y su familia, describir el proceso de aprendizaje (sobre la enfermedad) experimentado en la clínica y la aplicación del mismo en su diario vivir. La metodología cualitativa se aplica a grupos sociales que comparten una situación similar.

En este caso, la diabetes y la etapa de la vida, son las situaciones en común de los adultos mayores que participaron en este estudio de tipo cualitativo.

En el caso de sus familiares, el hecho de brindar apoyo a un adulto mayor diabético, los acreditó para la participación en el proceso investigativo, el cual se llevó a cabo con seis adultos mayores diabéticos (de 60 años y más) de diferentes sexos, atendidos en la clínica, que permanecían con cifras de glicemia elevadas por no cumplir con las indicaciones dadas por el equipo de salud (médico, enfermera y otros).

La escogencia de esta clínica se debió a que brinda atención a gran cantidad de pacientes diabéticos pertenecientes a diferentes clases sociales y económicas. Según algunas de las autoridades, muchos permanecen con cifras altas de glicemia a pesar de que acuden a la clínica de atención al diabético, en la cual se brinda educación acerca del control de la enfermedad.

PROCEDIMIENTO PARA LA RECOLECCIÓN Y ANÁLISIS DE LA INFORMACIÓN

Una de las técnicas principales que se empleó con los participantes, en la investigación, fue la de grupos focales descrita por Scrimshaw y Hurtado (s.f.). La otra técnica fue la entrevista, con preguntas semiestructuradas, la cual se utilizó con los miembros del equipo de salud.

La proponente fue la moderadora de los grupos apoyada en una guía diseñada para generar las discusiones y auxiliada por un estudiante, quien hizo las respectivas anotaciones y por una grabadora, autorizada por los participantes.

CATEGORIZACIÓN DE LA INFORMACIÓN

Después de recoger la información, se hizo la transcripción literal de la discusión de los grupos focales y del contenido de las entrevistas. Se realizó la categorización en temas y subtemas en los que se podía analizar la información. Los temas seleccionados son: 1) Características de la educación dirigida al adulto mayor diabético y su familia. 2) Barreras en el enfoque educativo actual que limitan la participación activa del adulto mayor diabético y su familia en el tratamiento de su enfermedad. 3) Métodos utilizados en la educación del adulto mayor diabético y su familia, que facilitan el proceso de toma de decisiones en cuanto a la necesidad de modificar sus hábitos y estilo de vida. 4) Visión del adulto mayor diabético y su familia en cuanto a una propuesta educativa. 5) Acciones del gerontólogo propuestas por el diabético, por su familia y por el equipo de salud.

INFORMACIÓN OBTENIDA Y ANÁLISIS

La presentación de los resultados se divide en tres secciones: 1º Situación actual de la educación de los diabéticos en la Clínica. 2º Información sociodemográfica de los participantes. 3º Presentación y análisis de la información obtenida a través de los grupos focales y de la entrevista semiestructurada, comparándola con la teoría para establecer la triangulación y por ende la validación de los resultados.

SITUACIÓN ACTUAL DE LA EDUCACIÓN DE LOS DIABÉTICOS EN LA CLÍNICA

Está a cargo de un equipo interdisciplinario conformado por cinco profesionales: dos médicos, una enfermera, un microbiólogo y una farmacéutica. Programan e imparten dos cursos al año para los pacientes que tienen hipertensión arterial y/o diabetes. No se realiza un diagnóstico del educando previo a la planificación del proceso educativo, por lo tanto no se programa con base en las necesidades.

Tampoco se extiende una invitación expresa, a los familiares de los diabéticos, para que participen en el proceso educativo.
 
 

PERFIL SOCIODEMOGRÁFICO DE LOS PARTICIPANTES
CLÍNICA DOCTOR CLORITO PICADO, 2000
 
 
PARTICI- 
PANTES
SEXO
EDAD
ESTADO CIVIL
OCUPACIÓN
N° DE AÑOS DE SER DIABÉTICO
FAMILIARES CON QUIEN VIVE
 
V 
R 
L 
E 
R
F 
 M  
 M 
 F 
 F 
 F
 72 
70 
 67 
 66 
 62 
 62
Viuda 
 Separado 
Casado 
 Divorciada 
 Casada 
 Casada
Oficios Domésticos 

Barbero activo 

Policía pensionado 

Costurera activa 

Oficios domésticos 

Maestra pensionada

 15 
 16 
 21 
 10  
 18 
 12
Una hija 

Una hija 

La esposa y tres hijos 

Dos hijos 

El esposo y tres hijos 

El esposo 
 

En este cuadro se observa que el grupo estaba compuesto por cuatro mujeres y dos hombres cuyas edades oscilaron entre 62 y 72 años. Además tenían un promedio aproximado de quince años de padecer de diabetes, algunos vivían con el cónyuge e hijos mientras otros vivían sólo con los hijos.

La siguiente sección contiene parte de la información obtenida con su respectivo análisis por temas; se presenta textualmente y entre comillas, algunas de las expresiones de los diabéticos, los familiares y el equipo de salud; se anota una "d" cuando se refiere a la o el diabético(a) y una "f" o "e.s" cuando se trata de un familiar o un miembro del equipo de salud respectivamente. Asimismo se introduce alguna cita teórica que valida dicho análisis.

1. Características de la educación dirigida al adulto mayor diabético y su familia

Empleo de una técnica magistral que se caracteriza por poca participación de los diabéticos y ausencia de los familiares en las sesiones educativas, éstas son monótonas y sin motivación. De acuerdo con los miembros del equipo de salud, los cursos se dirigen a toda la población diabética e hipertensa de la clínica, en una forma indiscriminado, sin tomar en cuenta las diferencias etáreas. Según Beebe y otros (1991) debe haber motivación para favorecer cambios de actitudes que permiten transformar positivamente el estilo de vida de la persona, con el fin de que tome conciencia de su responsabilidad en el control de la enfermedad. Asimismo, Mata(a) (1998) y Solano (1998) señalaron que la educación debe tomar en cuenta la capacidad de aprendizaje de las personas mayores y la motivación que tengan para aprender.

Estas fueron algunas de las expresiones de los participantes:

"...no tenemos ninguna participación especial, pero yo pregunto cuando tengo dudas" (d)

' ... yo hasta ahora supe que había una reunión, pero yo no sabía que aquí hacían reunión a los familiares...". (f) "...una vez yo vine con mi mamá y me dijeron: espere allí porque vamos a esa aula a una charla. Y diay, yo me devolví". (f) "...a veces ella (la mamá) se duerme y yo también" (f) "...muchos ya ni quieren entrar a las charlas porque creen que se va a repetir algo que ya han escuchado; entran como a la fuerza. Algunos entran con periódicos y se ponen a leer..." (e.s.)

2. Barreras en el enfoque educativo actual que limitan la participación activa del adulto mayor diabético y su familia en el tratamiento de su enfermedad

Entre éstas se puede mencionar la planificación del proceso educativo al margen de las necesidades reales de los diabéticos y la familia. En ocasiones, no existe claridad en el mensaje, lo cual Impide el aprendizaje y por lo tanto no se logra el objetivo propuesto.

Según Assal (1996:19)"... pocas veces se han tomado en consideración al planear los programas educativos "hacia personas específicas", los períodos de vida por los que pasan..." Knowles (1990), menciona que es importante la participación de los adultos mayores en el diseño de los planes de acción que los concierne y en la toma de decisiones de su salud.

Algunas de las expresiones de los participantes fueron:

"...nos explican mucho, los doctores son muy buenos, pero a veces dicen cosas que no entiendo" (d)

"...no tenemos ninguna participación especial, pero yo pregunto cuando tengo dudas"(d)

En la organización "...no interviene ningún diabético, solamente el equipo de salud que está conformado por..." (e.s.)

3. Procedimientos utilizados en la educación del adulto mayor diabético y su familia, para facilitar el proceso de toma de decisiones en cuanto a la necesidad de modificar sus hábitos y estilo de vida

Sólo una participante percibió el método de persuasión utilizado, el cual se considera amenazante y lo describe en la siguiente expresión: "...la doctora me dijo que yo soy la que me voy a morir si no sigo el tratamiento, ella no" (d)

Los demás no han percibido ningún método en especial. Es necesario desarrollar estrategias que motiven a los adultos mayores a aprender lo concerniente a su enfermedad y a poner en práctica lo aprendido; basar el proceso educativo en la experiencia de la vida parece ser una buena estrategia para lograr los objetivos deseados.

Según Knowles (1990), las experiencias de los aprendices adultos deben estar incluidas en cualquier tema propuesto, así como, en el proceso de exponer dicho tema, el cual debe ser práctico y relacionado con la vida actual del adulto.

Es indispensable, el proceso educativo como la integración entre el conocimiento y el afecto, se trata de modificar conductas socioculturales que afectan la calidad de vida de las personas ancianas, debe haber motivación para favorecer cambios de actitudes, tanto en ellos como en sus familiares, que les permitan transformar positivamente el estilo de vida, con el fin de asumir la responsabilidad en el control de la enfermedad (Prenso, citado por Mata, 1998; Beebe y otros, 1991).

Lo anterior se basa en las siguientes expresiones:

"...cuesta mucho, es educación y educación, en todas las citas decirles..." (e.s.) "...se les da educación individual también de parte de cada una... a los pacientes, de acuerdo a los problemas que va presentando cada paciente, que si tienen triglicéridos, que si tienen colesterol... el tipo de alimentos que tienen que consumir... y también se está haciendo énfasis en la preconsulta de parte de enfermería, se reparte papelería con dietas..." (e.s.)

4. Opinión de los participantes en cuanto a la educación que debe recibir el adulto mayor

Los adultos mayores muestran preferencia por reunirse en grupos pequeños con personas de su misma edad, en un ambiente ameno con refrigerio. La práctica de ejercicio físico y la participación de los familiares en las sesiones educativas, son algunos de los cambios expresados por el grupo, así como charlas más explícitas y detalladas.

Mitchel (1990) dice que las necesidades educativas de los adultos mayores son muy particulares debido a la edad y al riesgo de complicaciones.

Asimismo, Padilla (1997:14) señala:

El uso de grupos pequeños de un programa de educación en diabetes, permite tomar como base, para la elaboración de los contenidos educativos del programa, las experiencias de la vida diaria del paciente y su entorno... El estrecho lazo que se desarrolla entre los pacientes y que funcionan como grupo de apoyo, promueve cambios positivos en la conducta y en los hábitos de los mismos, así como favorece la aceptación del tratamiento de la diabetes.

Las siguientes expresiones confirman lo anterior:

"...que vuelvan a hacer más reuniones así, con buen café y poca gente como hoy" (d) "...deben asistir los familiares a esas charlas para que conozcan que uno no se hace" (d)

"...porque al menos ahorita yo estoy así como impresionada, sé lo que es la enfermedad pero cómo cuidar a mi mamá no. Nos deberían de dar charlas y tener uno la disponibilidad de venir a las charlas" (f)

"Hacer énfasis en que el paciente conozca su enfermedad y las razones esenciales para evitar complicaciones crónicas y agudas" (e.s.)

5. Acciones del gerontólogo propuestas por el adulto mayor diabético, los familiares y el equipo de salud

Los adultos mayores diabéticos y la familia proponen que el gerontólogo debe tener un papel de guía, orientador, consejero y educador para con ellos. Por otro lado, el equipo de salud propone que debe brindar una atención integral en la esfera biopsicosocial y refuerzo educativo al adulto mayor.

El gerontólogo debe preocuparse para que estos pacientes tengan acceso a una buena educación sobre la enfermedad, ya que, como dice Jervel (1996) la educación es el medio para disminuir el costo de la ignorancia.

Estas fueron las expresiones de los participantes:

"...ayudarnos a hacerle frente a los años. Que le den consejo a uno, como es que tiene que sobrellevar uno porque yo también me impaciento" (d)

"...dar charlas a los familiares para que sepamos como atender a la persona con esa enfermedad" (diabetes) (f)

"Brindar apoyo biopsicosocial al adulto mayor diabético" (c.s.)
 
 

GUÍA DIDÁCTICA PARA EL AUTOCUIDADO DEL ADULTO
MAYOR DIABÉTICO

Posterior al análisis de la información y para cumplir con el segundo objetivo general, se consideró necesario diseñar una guía didáctica, con el fin de apoyar a los diabéticos y su familia en el tratamiento y al Equipo de Salud, en la labor educativa que desarrolla con ellos.

El documento se compone de: Introducción, Planificación del curso, Desarrollo del curso y Funciones del gerontólogo.

Cada una de estas partes están cuidadosamente elaboradas para una fácil comprensión de los diabéticos, familiares y facilitadores.

En la Introducción se hace referencia a la importancia de la educación del adulto mayor diabético, con el fin de que tome conciencia de su responsabilidad en el control de la enfermedad, para prevenir las complicaciones y lograr mejor calidad de vida.

En la Planificación del curso se describen los pasos a seguir para el éxito del mismo (diagnóstico de las necesidades educativas y diseño del curso) así como las unidades a desarrollar.

Para el Desarrollo del curso se presenta un ejemplo de guía didáctica y se hace un desglose de las cinco unidades a desarrollar. Además se diseñó un cronograma de actividades de la primera unidad.

Las Funciones del gerontólogo se describen en cada unidad y en un apartado donde se incluyen además, los conocimientos necesarios para llevar a cabo las acciones.

En la Bibliografía y Anexos se anotan los textos de autores en que se apoyó la guía y los instrumentos recomendados.

CONCLUSIONES

El enfoque cualitativo, dentro del cual se desarrolló la investigación, se compone de características importantes que permitieron estudiar a los participantes desde una perspectiva holística, o sea, como un todo, de tal forma que se pudo conocer y entender sus luchas y frustraciones con la enfermedad que padecen.

En respuesta a los objetivos específicos propuestos y de acuerdo con la investigación realizada, se concluye lo siguiente:

En lo que respecta al objetivo específico N°1: Reconocer las características de las acciones educativas, dirigidas al adulto mayor diabético y su familia:

Las acciones educativas no están basadas en las necesidades reales de esta población, por cuanto no se realiza un diagnóstico previo, como primer paso de la planificación del proceso de enseñanza-aprendizaje.

Segundo objetivo específico:
Identificar las barreras en el enfoque educativo actual que limitan la participación activa del adulto mayor diabético y a su familia, en el tratamiento de su enfermedad.

La técnica magistral empleada para impartir las charlas, promueve la pasividad y lleva al educando al cansancio y aburrimiento, por lo que su atención se dispersa y no aprende lo suficiente, para poder enfrentar las vicisitudes de la enfermedad.

En el tercer objetivo específico:
Determinar los métodos utilizados en la educación del adulto mayor diabético y su familia, para facilitar el proceso de aprendizaje y toma de decisiones en cuanto a la necesidad de adherirse al tratamiento indicado.

Se concluye que dichos procedimientos no son claros para la mayoría de los participantes, por lo tanto, si existen, pasan desapercibidos, excepto para una adulta mayor diabética, que los percibe en forma negativa, por el aspecto amenazante de la expresión que le fue dirigida.

Cuarto objetivo referente al:
Diseño una propuesta educativa que permita la participación activa del adulto mayor diabético, junto a su familia, en el proceso de aprendizaje y que favorezca la consecuente adhesión al tratamiento indicado.

Los adultos mayores diabéticos que participaron en el grupo focal, prefieren reunirse en grupos pequeños en un ambiente ameno. Desean que las charlas sean más explícitas y específicas, para mayor comprensión de las mismas y poder relacionarlas con las modificaciones que deben realizar en su estilo de vida. Asimismo, existe el deseo de ayuda para aprender a convivir con los problemas de la vida cotidiana.

En el último objetivo específico:
Describir acciones que puede realizar un gerontólogo, como miembro del equipo de salud, en la educación del adulto mayor diabético y de la familia.

Se concluye que los adultos mayores diabéticos consideran que el gerontólogo debe ser guía, orientador y consejero de ellos y de sus familiares. Mientras que los miembros del Equipo de salud consideran que debe encargarse del aspecto biopsicosocial de los diabéticos.

BIBLIOGRAFÍA

1. Alleyne, G. En O.P.S.(1996). Educación sobre Diabetes. Disminuyamos el costo de la Ignorancia. Washington, D.C: Oficina Sanitaria Panamericana.

2. Assal, J. (1996) en Educación sobre diabetes, disminuyamos el costo de la Ignorancia. "Problemas en la Educación sobre Diabetes". Washington, D.C: Oficina Sanitaria Panamericana, Oficina Regional de la Organización Mundial de la Salud.

3. Beebe, Ch. y otros (1991). Nutrition Management for individuals with non- insulin dependant D.M. in de 1990's: A Review by the Diabetes Care Education, Dietetic Practice Group. J.A.D.A.91 (2): 194-209.

4. Caja Costarricense de Seguro Social (s.f.) Manual Para El Tratamiento de la Diabetes Mellitus. San José: Departamento de Medicina Preventiva: CCSS.

5.CajaCostarricense de SeguroSocial. (1993) Cambios en los Patrones de Atención de la Salud de los Ancianos Costarricenses, entre 1985 y 1990. San José, Costa  Rica: Depto. Microfotografía y Publicaciones.

6. Instituto de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud, (1999). Diabetes Mellitus en Costa Rica, un análisis interdisciplinario. San José: INCIENSA.

7. Jervell, J. (1996) en Educación sobre diabetes, disminuyamos el costo de la Ignorancia. Washington, D.C: Oficina Sanitaria Panamericana, Oficina Regional de la Organización Mundial de la Salud.

8. Knowles, M. (1990). The adult learner: a neglected species. 4 ed. U.S.A.: Gulf Publishing Company.

9. Mata, A(a). (1998). El Proceso de Orientación Aprendizaje en el Adulto Mayor. Curso de orientación y atención al anciano. Maestría en gerontología. Universidad de Costa Rica.

10. Meeks, M. (1980). Elaboración y uso de modelos para la enseñanza. 2 da. Ed. México: Editorial Galve.

11. Mitchel, M. (1990). Role of the diabetes educator for older adults, Diabetes Care 13 (Suppl 2): 60 -65.

12. Padilla, G. (1995). Impacto de un Proceso Educativo en Pacientes Diabéticos tipo II, sobre la Evolución del Consumo de Alimentos. Tesis de Licenciatura en nutrición, Universidad de Costa Rica.

13. Scrimshaw, S. y Hurtado, H. (s.f.). Procedimientos de asesoría rápida para programas de intervención y prevención de la salud. Universidad de California. Los Ángeles: Editorial Universidad de California.

14. Solano, O. (1998). El aprendizaje en los adultos mayores. Curso de Autocuidado del anciano. Maestría en gerontología. Universidad de Costa Rica.
 
 



* Master en Gereontología. Dirección Técnica de Servicios de Salud de la CCSS.