Editorial
 
 
En el mes de julio del presente año, se cumple el período que me ha correspondido ejercer la presidencia del Colegio.

Han sido dos años de incesante labor.

En este tiempo, como nunca antes, he aprendido a conocer tanto, lo que es la profesión de enfermería como las personas que conforman el Colegio. La experiencia ha significado un enriquecimiento personal, tanto por todo lo bueno que he vivido con compañeros (as) de trabajo que tuve la oportunidad de visitar y conocer en todo el país, como con aquellas dificultades producidas y que al final significaron darme cuenta que el enfrentarlas eran un estímulo para continuar con la gestión de presidenta.

El proceso implicó un aprendizaje constante.

El hecho, de haber sido la primera gestión en la que una Presidenta estuviera a tiempo completo, dirigiendo el Colegio, implicaba que el reto se constituyera en un desafío  que implicaba una mayor responsabilidad. Con esta gestión se inició un camino nuevo en cuanto a lo que había sido la administración del Colegio durante toda su historia. Considero que, conjuntamente con las compañeras (os) comenzamos a escribir una historia del Colegio, distinta. Estoy convencida que los que continúen la gestión, ya sea como presidente o presidenta retomarán el mismo estandarte que aferramos durante estos dos años y que se traduce en tener un Colegio a la altura de lo que significa esta digna profesión.

Han de saber que no es fácil, pero han de saber también, que vale mucho la pena cuando amamos la profesión y tenemos la posibilidad de hacer algo por ella.

                                                                     "Gracias por darme esta hermosa posibilidad".

Licda: Margarita Araya Solís Presidenta del Colegio de Enfermeras de Costa Rica